martes, 2 de septiembre de 2008

Los Peruanos Somos Infelices...

Un reciente estudio publicado por investigadores de la Universidad de Michigan revela que (¡agárrense!) los peruanos somos los más infelices de latinoamérica. Por cierto, un par de locutores del Canal 5 salieron hoy por la mañana a tratar de ridiculizar la noticia, para lo cual no tuvieron una idea más infeliz que entrevistar a un grupo de gente con cara de aburridos. Claro está, los encuestados de marras decían sentirse "muy felices", aunque sus rostros dijeran todo lo contrario.

Para quienes hemos ido al extranjero, y conocido el carácter y talante de otras nacionalidades, esta noticia responde absolutamente a la verdad. En efecto, los peruanos nos distinguimos por algunas cosillas que deben hacernos pensar:

  • Nos andamos quejando de todo, echándole la culpa al vecino, a la pareja, a los hijos, al gobierno, etc.
  • Somos acomplejados respecto a los extranjeros, al que tratamos como un dios así nos traten como la mierda cuando vamos a sus paises.
  • Despreciamos nuestros origenes mestizos, porque el blanco desprecia al cholo, y el cholo al negro; es más, un cholo claro desprecia a otro cholo más oscurito, y un mulato a un negro retinto. Esto impide una verdadera integración, y es el motivo de que todo el mundo diga que en el Perú hay "racismo asolapado".
  • La brecha entre ricos y pobres se ha ido ampliando, con lo que la clase media ha desaparecido, con unos pocos corridos hacia arriba y una inmensa mayoría hacia abajo.
  • Siguiendo con el tema, cargamos con una serie de lacras. Parafraseando a don Manuel Gonzales Prada, él decía que eran "el blanco calato", "el negro con plata" y "el cholo con poder".
  • Mientras la música distintiva de otros paises es alegre, como el samba brasilero, el joropo venezolano o el vallenato colombiano, nuestra música autóctona es profundamente melancólica, como el vals y el huayno, que en sus letras no hacen más que recordarnos puras desgracias.
  • El propio himno nacional terminó por incorporar una estrofa apócrifa, la del "largo tiempo", que no se sabe quien la puso, pero que llegó al himno para quedarse inamovible "per secula seculorum".
  • Nuestros héroes son todos perdedores: Miguel Grau despedazado en el Huáscar, Alfonso Ugarte aventándose con su bandera desde el Morro de Arica, Bolognesi con lo del "último cartucho" y muriendo de un culatazo, Leoncio Prado fusilado por un pelotón en su lecho de dolor, etc.
  • Hacemos huelgas por cualquier huevada. Un gobierno no tiene luna de miel en este pais, y ni bien comenzando su período ya tiene que soportar un montón de paralizaciones, e intentar apagarlas cual bombero.
  • Los deportistas son una tira de fracasados, los futbolistas no ganan nada, las voleybolistas se quedaron a un miserable punto del oro olímpico, y en general nos caracterizamos por los casis.

Surge pues la pregunta de como se puede ser feliz en un pais así, en donde todo el mundo fracasa en lo que hace, donde los profesionales son pésimamente pagados y muchos terminan de taxistas, donde casi todos somos pobres en menor o mayor medida; así que a mí, en lo personal, no me sorprenden estos resultados. Claro está, me supongo que la Zubiate y el Iwasaki no se lo explican, porque ellos ganan bien pese a trabajar sólo 3 horas diarias de lunes a viernes. Así cualquiera se sorprende...